ENCIERRO EL MOLAR 1/6/14. Último tramo y Capea
Último día de encierros de este
2.014 en la localidad madrileña de El Molar. Se correrían cuatro toros de Urcola,
del ganadero Victorino Martín. Esta ganadería la forma en 2.002 al comprar reses
de Vega Villar y Urcola, es un encaste parecido a la otra ganadería de
Monteviejo, pero con el extra de Urcola. Son toros con movilidad, bajos y
bastos que van muy bien en las corridas de rejones como fue el caso. Los cuatro
toros fueron feos, con las defensas claramente despuntadas pues eran para
rejones. Tres de ellos eran quinqueños y otro un utrero.
Encierro sin salsa ni emoción. Lo
primero que llamo la atención fue que los cabestros salieron directamente desde
la plaza, y no como había sucedido en días precedentes desde el camión de
suelta. También aumentaron el número de cabestros, pasando de 3 a 5. La primera
carrera fue con "Relojillo" herrado con el número 33 y guarismo 1. Un
utrero grandon, que salió rápidamente del camión y realizó el encierro solo
junto a uno de los cabestros más jóvenes. Las mejores carreras se vieron en el
tramo final, donde un joven de blanco adelanto al cabestro y toro en el
callejón de la plaza, cruzandose a estos de izquierda a derecha, demostrando
tener patas.
La segunda carrera era con
"Cartuchero", el 48 y de guarismo 9. Toro largo y feo. Hizo el preimer
tramo junto a lo mansos, adelantándose a ellos en el tramo de tierra,
ofreciendo bellas imágenes de los mozos corriendo en las astas del toro, con lo
bueyes por detrás.
El siguiente en hacer el
recorrido fue "Quinceño", número 64 y guarismo 9. Muy parecido a los
anteriores. Muy escondido entre los cinco cabestros, se hermano a ellos nada
más bajar del camión y no asomo en ningún instante la cabeza. Toro soso, que
rehuyó en todo momento la pelea.
La última de las carreras, la
que ponía el fin de los encierros en El Molar en este año era con el 58,
"Compuesto", también de guarismo 9. Se quedó en los corrales de
suelta, saliendo los cabestros por delante. Fue de talanquera en talanquera,
atendiendo a todos las llamadas que desde los barrotes hacía el público. Fue lentamente
hasta la plaza, tirando de él pastores y buenos corredores, les costó bastante,
ya que eran demasiados los que llaman desde detrás de las talanqueras. Este no
es sitio para citar a los animales, ya que estos pueden lastimarse, incluso
puede llegar a escaparse.
Cuando acabo el encierro se
soltaron 3 vaquillas en la plaza. Eralas con movimiento, que sirvieron para que
los mozos las recortaran, rodaran y saltaran.
Fotos realizadas by RGH
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